A todos nos pasan los años y es normal que con el tiempo los órganos -incluidos los ojos- tengan un desgaste. Si su visión se ha vuelto borrosa, turbia o débil, hay probabilidades de que se esté desarrollando una catarata. La buena noticia es que ahora problemas como las cataratas o la visión nublada se pueden solucionar.

¿Qué son las cataratas?

Una catarata es una nubosidad en el cristalino del ojo que dificulta la visión. Los rayos de luz viajan a nuestro ojo a través de la pupila y se enfocan sobre la retina por medio del lente. El lente debe ser transparente con el fin de poder enfocar la luz adecuadamente sobre la retina, cuando el lente se opaca la persona sienten como si estuviera viendo con un vidrio sucio y es allí cuando se debe consultar al especialista.

Por lo general no se trata de ninguna enfermedad sino de un envejecimiento ocular, aunque existen algunas causas externas que pueden anticipar la aparición de cataratas: Un golpe, una punción, un corte, el calor intenso, una quemadura o que la madre haya padecido rubéola durante el embarazo, aún así debemos tener claro que no es ni un tumor, ni una formación de piel o de tejidos nuevos sobre el ojo, sino que la lente misma se nubla.

El Único Tratamiento Realmente Efectivo Para Las Cataratas es la Cirugía

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Primero ten claro que no importa tu edad, la cirugía de cataratas es un procedimiento que se puede realizar en cualquier momento, solo tendrás que hacer unos exámenes médicos de rutina como es usual para cualquier cirugía.

En la cirugía de cataratas el lente nublado se remueve con la técnica de emulsificación y es reemplazado con un lente artificial transparente, un implante de plástico, silicona o acrílico, el nuevo lente transparente permite que la luz pase a través de la retina y se enfoque adecuadamente, haciéndose parte del ojo no vas a sentir nada extraño, solo una gran mejoría en la visión.

Este es un procedimiento que no necesita hospitalización y solo requiere algunos cuidados mínimos como reposo, no tocarse los ojos, usar protectores para los ojos cuando duermas, y anteojos de sol contra la luz brillante durante los primeros días.